Jean Paul nace en el año 2003 en una habitación oscura de la ciudad de Murcia, escenario donde se registraron sus primeras grabaciones bajo el nombre de “Seis canciones para un día de lluvia”. Raúl Bernal formó, desde su más tempestuosa adolescencia, parte de varios grupos murcianos. La evolución mínima de cualquier compositor hizo, en este caso, que sus canciones no formaran parte de ningún proyecto en el que militaba, así que, por la gracia de dios, se creo un espacio irreversible para que sus canciones pudieran disfrutar de días de sol y tempestades a partes iguales y a este hueco se le llamó Jean Paul.

El enemigo más duro del artista es el tedio y éste provocó un vacío de dos años de sequía compositiva.

En el año 2005, Raúl Bernal se traslada a Granada para formar parte de la banda de Jose Ignacio Lapido.  Y en esta ciudad de poetas sobrevalorados es donde se vuelve a fraguar la inconexa dicotomía de arte y bienestar. Jean Paul vuelve a componer, en el año 2007 graba “Serpientes y martirios y se presenta en directo con una banda compuesta por algunos de los músicos más influyentes de la ciudad, Víctor Sánchez, Popi González, Paco Solana, Isaac Zafra y Zahara. Con “Serpientes y martirios”, el grupo obtiene algunas medallas en los concursos nacionales de turno y ante la necesidad de no perder el tiempo, se decide a grabar su primer largo.
Jean Paul entra en los estudios de Paul Grau, en Motril (Granada), el día siete de Agosto del año 2008. Durante cinco días se grabó su primer L.p., “Breve Historia Universal”, esta vez con un miembro más en la banda, Marcos Muñiz.
“Breve Historia Universal” contó con las colaboraciones de Zahara, Jose Ignacio Lapido, Alfonso Alcalá y Sara Beyermann
Salió al mercado un dos de Marzo del año 2009, el día que Orlando Caputo anunciaba la séptima crisis cíclica del capitalismo.
Tras una pequeña gira nacional presentando “Breve Historia…”, Jean Paul decide darse un tiempo de reflexión y decidir cuál es su camino y cómo debe andarlo.
Es durante el invierno de 2010 cuando Raúl Bernal vuelve a componer con la conciencia del artesano y durante ese tiempo aparecen retazos del nuevo camino. 
Se grabó una maqueta en casa con un buen puñado de canciones para que se dieran una vuelta por ahí y buscaran un hogar para poder ver la luz. No hubo respuesta alguna. Pero Jean Paul se enorgullece de ser un enfant terrible y se acercó de nuevo al precipicio de la autoedición y así volver a despertar a Bartlevy Records, su propio sello discográfico.
La dicotomía de arte y bienestar provocó que Jean Paul trabajara de la forma más cómoda que puede trabajar una banda: en casa y con todo el tiempo del mundo, así que se empezó a vislumbrar el nuevo trabajo en nuestra propia casa, siendo dueños en todo momento de nuestro tiempo y de nuestro esfuerzo.
“Manqué” (adjetivo francés que alude a la frustración) se compondría de seis canciones, grabadas con el cariño y el mimo más absoluto por todos los miembros de la banda. 
Paco Solana sale de la banda y el grupo vuelve a estructurarse.

Como decía aquel: “Si el mundo es un delirio, yo no”, Jean Paul decidió estar más al margen de la industria, no aceptando sus cánones, sus valores y mucho menos su criterio y lanzaría “Manqué” al mercado en una pequeña edición de trescientos ejemplares en vinilo de doce pulgadas y con un peso de ciento ochenta gramos, sin darle hueco al formato cedé y sin admitir ni una sola reedición, el día diecisite de Octubre del año 2011.
Manqué contó con colaboraciones de músicos muy allegados al grupo. Luis Arronte, Juan Alberto Martínez (Niños Mutantes), Zahara y Alfonso Alcalá. Y con artistas que se involucraron como tanto con ellos en el nuevo disco: Salvador Serrano, Resu Ros, JASS, Pablo Sánchez y Cris Ferreiro.
Jean Paul sigue siendo un secreto y, hermanos, esto sigue siendo una caza de brujas, así que disfrutad en silencio de lo que puedan ofrecer, no habléis a voces sobre ellos porque os tomarán por uno de ellos y eso puede ser lo más sinsentido de vuestras vidas.


Dichoso el poeta que con alabanzas recibe pan.